Con Ernesto y Fidel
-A nosotros nos gusta acompañar las palabras con cuerdas y cueros tensados -expliqué, mientras le extendía Luz en las Ventanas. Ese nosotros escondía un revoltijo de andaduras, canciones y palabras compartidas donde él mismo había participado desde la distancia.
-¡Un regalo! -clavó sus ojos en los colores de la superficie. Agradeció el disco con humildad de campesino que recoge lo que ha brotado de la tierra.
Charlamos sobre México, sobre los dolores que le habían confinado al reposo durante todo el año anterior, sobre su reciente y feliz retorno a los senderos. Cuando me alejé, un remolino de personas empezaba formarse en torno suyo, en las manos cargaban libros como pequeñas bestias que iban a ser signadas.
2 comentarios:
Hola!!.¿Cuándo ha estado Galeano en Barcelona?¿.Por qué siempre llego tarde a todo??!!!.Bueno,quina sort noi!!!
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